Cementerio Oku No In

Japón, una mezcla de cultura, espiritualidad y modernidad. Después de visitar la ciudad de Kyoto y antes de viajar hasta Tokyo decidimos visitar Koyasan, un pequeño pueblo budista perdido en las montañas. No recuerdo ya el número de trenes que tuvimos que coger para llegar hasta él ni el número de horas que nos tomó. Solo recuerdo que los dos últimos trayectos antes de llegar al pequeño templo en el que nos alojábamos, lo hicimos en un pequeño tren "vertical" (el de la foto) y en un autobús que parada a parada iba dejando a todos y a cada uno de los visitantes en el alojamiento escogido. Mi ilusión era visitar el cementerio de Oku No In, así que después de despertarnos a las 5:30 de la mañana para rezar junto a los monjes budistas, nos encaminamos para recorrerlo.