La gran abadía
Conocida mundialmente por ser el panteón de los monarcas ingleses, sede de sus coronaciones y otros actos de gran boato, dentro de sus recios muros pueden contemplarse algunos de los mejores ejemplos de la arquitectura medieval londinense. Hay que ir con cuidado, porque por todas partes, ya sea en el suelo, en las paredes o en las columnas hay mausoleos y tumbas de personajes famosos y héroes nacionales británicos.
Pero empecemos desde fuera, porque según nos vamos acercando a ella, nuestra atención se ve literalmente absorbida por las preciosas torres gemelas que flanquean su entrada oeste ( no entraremos por ahí porque está reservada a actos oficiales) y a los delicados pero potentes arbotantes que se reparten el peso de la nave que se eleva hasta los 31 metros de altura y que es la más alta de Inglaterra. Para poder contemplar y darnos cuenta de la grandiosidad del templo debemos situarnos en el principio de la nave y tendremos una vista espectacular.