Catedral de León

A través de este proyecto se pretende dar la posibilidad al público de acercarse a las preciosas vidrieras de la Catedral de León. Se han instalado una serie de plataformas elevadas a 14 metros de altura del suelo, en las que, en grupos de máximo 20 personas, podemos contemplar tanto el interior del templo como las vidrieras, en la proximidad y bajo una perspectiva inédita y diferente. Es algo espectacular y digno de ver.

La entrada cuesta 2€ (que van destinados a la conservación y restauración de las vidrieras), y hay que reservar cita. Puede hacerse por teléfono en el +34(638)479419 o en una taquilla que han habilitado en la fachada izquierda de la Catedral.

La Catedral de León es una de esas joyas que tenemos en España y que aunque va gozando de reconocimiento poco a poco a nivel mundial, aún es una gran desconocida. Por eso sorprende tanto cuando entras y las luces de las descomunales vidrieras bañan el interior. La simbología de la Catedral está en cada detalle. Los fieles entraban por la parte Oeste, caminando por la parte Norte para volver una vez recorrida por la Parte Sur. Es por eso que la vidrieras iluminadas diractamente por el sol están en la parte Sur, que son las que corresponden al nuevo testamento, una vez que nació Jesucristo y que por lo tanto se vio "la luz". Las del Norte corresponden al Antiguo Testamento.

Sin duda uno de los rincones más bonitos y transitados de León. Lo normal es llegar a ella subiendo la Calle Ancha, una zona llena de terrazas donde tomar tanto un café como copas por un precio algo más elevado que en otra zona de la ciudad. Como todos sabemos es uno de los mayores exponentes del Gótico en España y el edificio que mejores vidrieras tiene en todo el mundo junto con Notre Dame.
Hoy en día entrar cuesta 5 euros pero merece la pena, aunque eso si, hay que entrar bien abrigado!
Además cuenta desde hace unos años con una plataforma elevadora que nos permitirá verla desde otro punto de vista.

La religión instituyó las vidrieras para que la luz entrara tamizada en los recintos de culto e hiciera más sentidas las oraciones. La "pulchra leonina" debió de ser una especie de piscina donde se recogían los efluvios acuosos de los ojos de los fieles, pues tal belleza de vidrieras debía hacer sentir a los fieles unas emociones indescriptibles.

Ya lo digo en el título de este rincón, la Catedral de León probablemente sea la más bonita de España con permiso de Santiago, Burgos y otras que seguro no le desmerecen nada. El interior es silencio y color. Lo que más llama la atención nada más entrar son sus inmensas vidrieras que no sólo pueden admirarse desde la base sino que se ha habilitado una plataforma a 14 metros de altura que permite contemplarlas muy de cerca dentro de un proyecto que ha sido denominado ‘El Sueño de la Luz’ previo pago de un ticket.

Las visitas se realizan en grupos guiados de máximo 25 personas que durante media hora acceden desde el triforio, que no sólo te ofrece una vista directa de las vidrieras sino también una perspectiva elevada de la nave central. Curiosidad: la catedral leonesa posee en su interior el órgano más monumental de Europa.