El castillo de Amasya se encuentra en...
El castillo de Amasya se encuentra en un enclave extraordinario, ya que está situado en lo más alto del monte que custodia la ciudad y en el que se encuentran excavadas en la roca las tumbas de los Reyes del Ponto.
Para llegar a esta ciudadela hay que coger un camino que parte de Amasya y que indica "Kale". Se trata de un camino de unos dos kílómetros que se puede realizar en coche o andando (siempre es preferible ir andando para poder observar la belleza de la zona, que es impresionante porque está llena de vegetación). A los dos kilómetros hay un parking, ya que no se puede subir más con ningún tipo de trasnporte y desde allí tendremos que andar otros veinte minutos aproximadamente para poder llegar hasta la cima. Se trata de un camino empinado pero sencillo que puede realizar todo el mundo, eso sí, es aconsejable llevar agua en verano porque el sol suele pegar con fuerza.
Lo que se conserva de esta ciudadela es bastante poco, concretamente podemos ver los restos de una muralla que fue construída en la época Póntica y el castillo, que también fue construido en la época póntica y posteriormente fue restaurado primero por los otomanos y por último en 1980.
Una de las cosas que más llaman la atención de la fortaleza es un viejo cañón que hay en un saliente y que, al parecer, se dispara todos los años durante el Ramadán para avisar de que ha finalizado el ayuno diario.
Por cierto, es bastante habitual encontrarse en la cima a los jóvenes de Amasya, porque les gusta mucho quedar en este lugar. Suelen ser muy hospitalarios y agradables y, a pesar de que algunos no hablan muy bien el inglés, siempre están dispuestos a entablar una conversación con los turistas.
