En lo más alto, vigilante
Al nordeste de la isla de Mallorca encontramos este pequeño pero precioso castillo, con su forma de triángulo perfecta, desafiando al tiempo. Desde arriba sabiéndose estratégico, divisa las tierras del interior, parte de la preciosa costa y el canal de Menorca que une y separa la isla grande de la pequeña.
Trepamos, más que subimos por las empinadas escaleras que nos suben hasta la base del castillo y tras franquear la entrada esperamos en un punto concertado la llegada de nuestra guía ( incluida en la tarifa).
Vamos recorriendo la fortaleza, que se levanta sobre un terreno en el que ya dormían los pobladores de época prehistórica, los romanos, los musulmanes y finalmente los cristianos, que dieron empaque y potencia a la primitiva alcazaba.