Mirador excepcional para una ciudad única
El Castel San Pietro (Verona, Véneto, Italia) se erige en lo alto de un monte con el mismo nombre. Durante siglos éste fue un lugar de elevada importancia estratégica, ya que desde su posición privilegiada se podía controlar la entera ciudad.
En 1801 las tropas napoleónicas destruyeron gran parte del castillo y de las edificaciones auxiliares internas. Entre 1852 y 1853 se erigió el actual cuartel austríaco. El recinto tiene una planta irregular, derivada de la morfología del terreno sobre el cual se construyó.
A pesar del largo periodo de abandono, el estado de conservación actual es aceptable. La parte exterior sur se ha convertido en un mirador privilegiado sobre la ciudad de Verona, muy frecuentada tanto por turistas como por locales. El interior del castillo se ha habilitado como parque público.