Una pasada de casa. Tanto las habitaciones, como la cocina, como los espacio comunes, están impecable, pero es que además, el exterior de la casa es impresionante. Aún así, lo mejor de todo es la atención que se recibe durante toda la estancia por la dueña de la casa. Una casa excelente para descansar y desconectar si renunciar a nada.
Se trata de una casa cuya construcción data del siglo XVIII, y que ha sido restaurada. Consta de tres plantas en las que se distribuyen diez dormitorios, tres zonas de estar, una biblioteca, el comedor y la cocina. Los muebles y decoración son de estilo clásico y tradicional, y sus instalaciones ofrecen todo el confort necesario para unas vacaciones de descanso.
Cuenta con actividades al aire libre como por ejemplo: visitas guiadas, rutas de senderismo, rafting, paintball y mucho más...
