Casa particular Belén
A Santiago llegamos ya de noche después de muchas horas en autocar desde Camagüey. Nos bajamos del bus, salimos de la terminal, esquivamos a las docenas de taxistas que había por allí y nos pusimos a caminar dirección el centro de la ciudad. El camino era fácil, sólo teníamos que seguir la avenida de los Libertadores pero el cansancio acumulado, el peso de la mochila (y eso que viajamos muy ligeros) y la subidita de la calle (Santiago tiene muchas subidas y bajadas) hicieron que nos metiéramos por la avenida de Céspedes a ver si dábamos con algún lugar económico.
Allí, entre música y gente bebiendo en la calle (eran los carnavales de la ciudad) dimos con la casa particular Belén, una casa con 3 habitaciones privadas con baño y aire acondicionado. El precio inicial fueron 25 CUC, el precio común por dormir en una casa particular en Santiago, pero intentamos regatear un poco y nos salió bien. Al final 20 CUC por noche con un pequeño desayuno a base de huevos fritos y pan duro (pero duro duro eh) incluido.