Una de las grandes casas de la ciudad
Pasear por el Parque Lira es, por sí, una buena experiencia. Pero, ya que estás por ahí, hay varios rincones por conocer, por ejemplo, si te acercas al extremo norte, encontrarás la Casa Amarilla, una de las grandes casas de la Ciudad de México.
Hay algunas versiones sobre el nombre del edificio, puede ser que se llame así, porque la casa estaba pintada de color amarillo, otras fuentes afirman que es porque ahí vivió el Marqués de las Amarillas, o sea, don Agustín Ahumada y Villalón, cualquiera de las dos versiones suena válida.
Originalmente fue fundada como hospedería religiosa en 1618, sirvió como convento, y también para albergar padres franciscanos de la orden pasionista. Sin embargo, tiempo después fue expropiada por el presidente Lázaro Cárdenas.
Tiene en la fachada principal un pórtico formado por dos pares de columnas, ya en el interior, podrás ver dos patios rodeados por muchas habitaciones. En la actualidad, este inmueble aloja las oficinas de la Delegación Miguel Hidalgo.
