Carrapateira

Para muchos españoles, especialmente andaluces, que huimos de las playas abarrotadas en las que tienes que pedir cita para plantar la sombrilla, merece la pena cruzar la frontera y plantarse en el Algarve. Y, ya que estás allí, ¿por qué no llegar hasta el fin del mundo?

Ver el atardecer en el Cabo de San Vicente es una experiencia espectacular, no sólo por lo magnífico del lugar, sino porque cualquier día del año estás rodeado de montones de lugareños y turistas que durante un momento contienen la respiración a la vez cuando los últimos rayos de Sol desaparecen.

Durante el día, Sagres tiene el encanto de calas pequeñas y un puerto pesquero, pero, un poco más al Norte, Carrapateira tiene unas playas enormes y preciosas, suficientemente tranquilas en temporada alta y con suficientes servicios como para poder disfrutarlas tranquilamente. Si queremos aún más tranquilidad, hay joyas semisalvajes como la Playa de Bordeira.

Carrapateira es un pueblecito de Portugal, cerca de Sagres. Está totalmente perdido. Si las grandes constructoras lo descubriesen se pondrían las botas. Sus parajes son espectaculares, rodeado de playas vírgenes deseadas por todo surfista. Arena fina junto a acantilados...Y todo junto a un pueblo donde las horas no pasan y la vida se hace en las puertas de las casas.

Es un pueblecito en el que tomarse un tentempié antes de ir a la playa, comprar fruta y alquilarse un neopreno y una tabla si llega el dinero. En la plaza se aprende la virtud de la calma: Un buen café hecho sin prisa, esperar a la sombra de los toldos, poder asearte en los baños públicos que están muy limpios...