Macabra capilla que pone los pelos de punta en la iglesia do Carmo
La primera visita que hicimos en Faro, nada más llegar y aparcar el coche fue a la iglesia do Carmo (del la orden del Carmelo). Una visita que en ese momento realizamos por recomendación de un señor que pasaba por allí y nos lo dijo. La cosa es que algo que fue casual se convirtió en una de las más impresionantes visitas hechas en los últimos años.
La iglesia en un magnífico ejemplo del barroco portugués profuso en oropeles y decoración. Sin embargo lo que realmente sorprende y asombra a partes iguales es la Capilla de los Huesos que se encuentra separada de la nave de la iglesia por la sacristía. Hay que cruzar ésta y salir a un pequeño jardín en el que al fondo se atisba un altar decorado con lo que parecen huesos. Y claro que lo son, pero este altarcillo es sólo una muestra de la capilla que se encuentra en el lado opuesto del jardín, justo por donde hemos entrado.
