Chapuzón en la bella Serra de Tramuntana
Recientemente fuimos a pasar el día a Banyalbufar. Somos unos enamorados de la Serra de Tramuntana, siendo este uno de sus pueblos más destacados y menos turísticos. Hacía calor, así que decidimos acercarnos dando un paseíto hasta Cala Banyalbufar y pegarnos un refrescante chapuzón.
Hasta ella se puede acceder perfectamente a pie desde el pueblo, basta con tomar la calle Major y andar unos minutos. De camino, tropiezas con tradicionales y bellas casas mallorquinas de piedra, numerosos bancales, terrenos cultivados y ¡algún que otro asno!. Todo muy rural. También se puede optar por ir en vehículo propio, hay parking gratuito.
A la calita se accede bajando unas escaleras. En seguida, llama la atención el impresionante acantilado que la protege. Es una pequeña zona de baño alargada y estrecha, con un diminuto puerto natural en uno de sus extremos que aloja diferentes pequeñas embarcaciones tradicionales. El entorno es rocoso y la arena brilla por su ausencia. Yo me volví como loca haciendo fotos.
Uno de sus principales atractivos es la pequeña ducha natural de agua dulce que hay en mitad de la cala y que hace las delicias de todos los que hasta ella se acercan. Es la única comodidad del entorno, pues no cuenta con ningún otro tipo de servicio.
En mi opinión, no echarás en falta nada, es un rincón maravilloso, salvaje y singular, que merece la pena visitar.
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