Me recomendó este café el dueño de un me...
Me recomendó este café el dueño de un mercadillo de antigüedades, sino hubiese sido bastante difícil encontrarle. La calle Newington sale de la calle céntrica Renshaw Street, y como es una calle cortada por las vías del tren no llama mucho la atención. Pero de todas maneras vale la pena acercarse, hay que subir bastantes escaleras y del otro lado de la puerta se abre un espacio muy grande con muchas mesas juntas y la tibieza de un café con fuegos prendidos y unas vistas increíbles. Es perfecto para cuando ya el cansancio y el fresco de la tarde y hace falta un poco de te o café y leer en tranquilidad.