Realizar muchas actividades como esquiar, andar en una moto acuática o subir solamente a la banana que garantizan diversión pura, la zona está rodeada de muchos locales de comida para disfrutar de buen pescado hecho de diferentes maneras y ahora podrás lanzarte desde la tirolesa más grande de América Latina sobre el mar.
Un rincón de tranquilidad entre tanto vaivén de la ciudad. Hay lugares ricos para comer pescados y mariscos, aunque se debe tener cuidado con la limpieza del lugar y los precios, ya que a veces los lugareños se quieren pasar de listos.
Se respira un ambiente de paz y claro también para lo que les gusta la diversión hay muchas atracciones las cuales están al servicio.
Su comida es riquísima y su playa es hermosa, todo es muy económico, su gente es muy amable y alegre, un consejo: no se vayan con los meseros piratas que están en la entrada del puerto.
Un pescado huachinango al mojo de ajo y disfrutando la puesta de sol.
Súper relajado, el clima delicioso, al igual que la comida y el entorno !!!
Donde puedes practicar varios deportes acuáticos. Así como nadar en aguas tranquilas y cálidas.
