Ayuntamiento de Praga
Quién duda que el edificio del Ayuntamiento es el centro de la Plaza de la Ciudad Vieja, e incluso de la mismísima Praga? Imponentemente se yergue en medio de ella como si de un faro se tratara; un faro-imán, me atrevería a decir, porque si nos damos cuenta, siempre pasamos por su lado aunque nuestra intención sea ir a visitar cualquier otro punto interesante de la ciudad. Se sabe que en su origen fue un solo edificio, y que fue creciendo con las diferentes adquisiciones que hicieron los ediles cuando era Ayuntamiento propiamente dicho. Esta amalgama de estilos es lo que lo hace más interesante y atractivo, incluso lo podría comparar con el Castillo Da Pena en Sintra, por la mezcla de cuento de hadas que rápidamente nos cautiva.
La visita al interior del edificio la podemos dividir en tres: sótanos, torre y dependencias nobles.
Aparte de la visita a lo alto de la torre, en el cuerpo de ésta se puede visitar los restos de una capilla gótica, con vidrieras restauradas después de la guerra y frescos en la bóveda, y protegidos tras un cristal, una visión supercercana de los apóstoles autómatas del reloj astronómico.
En las salas nobles se visita, acompañados de una guía ( que recibe la voluntad como pago), o por nuestra cuenta, con unos cartelitos informativos en varios idiomas, entre ellos el español, las sala de plenos , la Cámara del Consejo, con preciosos mosáicos de la década de 1930.
Lo más llamativo son los trabajos en madera en paredes y techos y las figuras que representan a Cristo, los ángeles y apóstoles, aparte de los restos de frescos en algunas estancias.


