Experencia de cierre
Siempre que uno recorre Europa, disfruta conociendo diferentes lugares importantes por su valor histórico, cultural o natural. Esto requiere caminar y a veces, correr, para garantizar un recorrido completo que permita hacer todo lo que uno se haya propuesto. Dedicar un último día para dormir en Assisi, implica poder descansar en un pueblito medieval, fecundo en historias, en paisaje y en espiritualidad, -aún para los no creyentes-, tan solo por sus silencios enriquecidos por el ruido de la naturaleza.
Lugar especialísimo para "sentir" que uno estuvo de vacaciones, visitar sus hermosos