Alrededores del cráter del ngorongoro

Anteriormente, durante nuestro viaje por Kenya y Tanzania habíamos visitado algún poblado masai, pero en general nos había dado la impresión de que estaban demasiado orientados al turismo. Sin embargo, en el trayecto hacia el cráter del Ngorongoro encontramos algunos masais a lo largo del camino y tuvimos la ocasión de detenernos y tratar de hablar con ellos. El trato era totalmente diferente; no trataban de vendernos nada e incluso permitieron que les fotografiásemos sin pedir nada a cambio. Un cambio agradable en contraste con los poblados más orientados al turismo que vistamos antes y después.

Un paraje inhóspito y alejado de las ordas de viajeros que visitan la reserva del Ngorongoro.

Zona gratamente recomendable en la que se puede observar a los masai en su vida real. Una de las paradas recomendada es el museo arqueológico, el cual recoge más de 50 años de trabajos arqueológicos en la Garganta de Olduvai.

Pagando una tasa también se puede hacer una visita a los yacimientos arqueológicos de lo que se ha denominado como la cuna de Humanidad. En estos, dependiendo del mes el turista puede tener la suerte de coincidir con alguno de los equipos que trabajan este lugar. Finalmente, sin derivarse mucho del camino principal, también es una vista recomendable el Olbalbal.