Un lugar que te sorprenderá
Estando de viaje hay sitios que te sorprenden e impresionan y que sabes que se va a convertir en una historia que vas a contar mil veces sin que te cueste nada, solo por el placer de recordarla. Este hotel con termas es así, una auténtica sorpresa y un autentico lujo. Situado en la falda del volcán Arenal, aprovecha la propia actividad geotérmica del volcán para calentar un río y desarrollar a lo largo de su recorrido una zona de baños termales absolutamente impresionante. Más de una veintena de zonas de baño, con diferentes temperaturas (según te alejas del volcán el agua se va enfriando y en otras zonas se mezclan con otros afluentes) y en un entorno único. Acabar bañándote con agua calentita en mitad de la selva entre nubes de vapor es una gozada. Tanto que hasta se nos hizo de noche.
Si además quieres quedarte en el hotel (hotel y termas están separadas unos 300 metros y hay un servicio de shuttle continuo hasta las 10 de la noche) es muy probable que alucines. Esta literalmente metido en la selva y vas a acabar durmiendo escuchando sonidos de animales. Las habitaciones son increíbles. Enormes, con una cama gigante (de esos colchones que vas a necesitar casi un taburete para subirte), con jacuzzi en medio y con una selección de cafés, tés... Además de tener wifi (muy bien!).
Para comer tienes dos opciones, ambas de buffet. Uno situado en el propio hotel y otro en la zona termal. Lo dicho. Una maravilla.


