Acantilados de Maro

Acantilados de Maro y Cerro Gordo

En el término municipal de Nerja, provincia de Málaga, se encuentra Maro. Se llega por la carretera nacional N-340 en dirección a Salobreña, a pocos kilómetros del pueblo de Nerja.

La visita a este paraje se inicia desde la plaza de Maro, donde ya se tienen vistas a la Torre vigía de la Marquesa, justo al frente del pueblo. Se puede ir andando hasta una pequeña cala de cristalina agua, también es posible ir en coche, pero en la temporada estival suele estar cortado el acceso al tráfico rodado.

Desde la Torre vigía de la Marquesa, es donde se divisan mejor los acantilados. Y si prefieres ver los acantilados con la torre, mejor dirígete hacía la antigua fábrica de azúcar, donde podrás acceder a alguno de los huertos de aguacate para tener la panorámica.

Vais en coche hasta Maro, que está al ladito de Nerja, y seguís por la antigua carretera nacional (que es por la que vas hasta Maro) N-340. Iréis durante un par de kilómetros por una zona medio urbanizada para entrar a continuación en un tramo de acantilados, con el mar a la derecha, en bajo, y la montaña a la izquierda.

Cada cierto tiempo, aparecerán a la derecha pequeños apartaderos y, desde ellos, se ven playas bajo terraplenes. Hay que caminar un ratito para llegar a cada playa. Nosotros estuvimos en dos. Pero yendo una semana, podéis descubrirlas todas.

También se puede ir a estas playas en kayaks desde Maro (planazo, pero que nosotros no hicimos; Edu acababa de cumplir un año y el chaleco salvavidas más pequeño le quedaba como una sotana). En una de las playas, que te marco en este mapa hasta las 12:30 o 1 estábamos casi solos.

Los Acantilados de Maro, son un Paraje Natural situado entre los municipios de Nerja, de la provincia de Málaga, y Almuñecar, de la provincia de Granada, están constituidos por una serie de acantilados de hasta 250 m de desnivel donde encontraremos calas de aguas cristalinas y nada masificadas.

Sitio precioso para visitar. Buena caminata para quien le guste andar.

La ruta en kayak por las ranuras del acantilado fueron espectaculares, siempre acompañado de delfines.

No podéis perderos ver esta maravilla de la naturaleza.