¿Quieres saber dónde pasar el día en la Sierra de Madrid con niños?
Si vives en la villa madrileña y te gusta desconectar los fines de semana y huir de las masificaciones, seguro que te has preguntado cuáles son los pueblos más bonitos de la Sierra de Madrid.
No tienes que irte muy lejos, ya que cerca de Madrid tienes todo tipo de distracciones a tu alcance: escalada, senderismo, zonas naturales de baño y monumentos de gran valor histórico.
Así que si no sabes qué ver en Madrid y sus alrededores, el Hayedo de Montejo, la Chorrera de los Litueros, el castillo de los Mendoza o el embalse de los Peñascales pueden ser el retiro perfecto.
Tomar contacto con el medio natural nunca antes fue tan fácil como con la ruta de la Boca del Asno, que discurre por el Parque Nacional de Guadarrama. Este camino lleno de pozas y vegetación endémica, se encuentra muy cerca de La Granja de San Ildefonso, lugar que puedes visitar tras terminar la ruta senderista.
Junto al célebre pueblo de San Lorenzo de El Escorial se encuentra el Centro de Naturaleza Cañada Real. Los más pequeños de la casa disfrutarán viendo la fauna ibérica predominante en la sierra de Guadarrama. Allí se pueden hacer diferentes yincanas e incluso actividades de gastrobotánica. Incluso se pueden realizar rutas micológicas para aprender todo sobre los beneficios y propiedades de los hongos.
En las inmediaciones del río Montejo, en Montejo de la Sierra, se halla un enclave de 250 hectáreas repleto de hayas que llegan hasta los 20 metros de altura. Además, es el lugar perfecto para conectar con la naturaleza y disfrutar de otras especies como avellanos, robles y cerezos. En los diferentes caminos senderistas puede que te encuentres tejones, mirlos y cárabos. ¡Manten los ojos bien abiertos! Y si te quedas con ganas de hacer más rutas, échale un ojo a las rutas por la Sierra de Madrid: 15 recorridos esenciales.
Una de las actividades que se pueden hacer en la Sierra de Madrid con niños es recorrer los alrededores del embalse de los Peñascales, en Torrelodones. La ruta circular que rodea la laguna es de aproximadamente dos kilómetros en los que observarás vegetación de ribera y aves como cormoranes y garzas reales, que anidan en las proximidades.
Una de las joyas medievales mejor conservadas de la Comunidad de Madrid es el castillo de los Mendoza. Mandado a construir por Diego Hurtado de Mendoza, fue uno de los símbolos de poder del Reino de Castilla. Su construcción fortificada estilo defensivo contrasta con su interior, más de estilo palaciego. Desde sus miradores se ve el paraje del embalse de Santillana.
Junto al castillo de los Mendoza, se encuentra el embalse de Santillana. Este ojo de agua regula el río Manzanares y en sus orillas se levantan bosques de fresnos y encinas. No será difícil avistar colonias de cigüeñas blancas. ¿Sabías que ambos padres participan en la incubación? Efectivamente, de esta manera los huevos no se enfrían en ningún momento.
Si hay un monumento natural en la Sierra de Madrid que impresione ese es La Pedriza. Esta gran roca de granito abarca 32 kilómetros de superficie y hace las delicias de los amantes de las escalada. También vías pecuarias y senderos se reparten por el berrocal, como una que sale de Manzanares el Real hasta Cancho de los Muertos. Cuenta la leyenda que esta insólita formación servía de guarida a los bandoleros. Además, por esta zona encontrarás casas rurales y hoteles con encanto en la Sierra de Madrid.
Aprovechando un día que vayas a visitar el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, puedes hacer la ruta de la Silla de Felipe II. Sale desde el municipio y, tras dos kilómetros y medio, se llega a un mirador desde donde se ve el monasterio y el bosque de La Herrería. Se cuenta que Felipe II lo usaba de observatorio durante las obras del convento y otras teorías remarcan que este lugar era un altar de sacrificios del pueblo vetón.
Una de las actividades gratuitas en la Sierra de Madrid que no te debes perder es la ruta a la cascada Chorrera de los Litueros. El recorrido de casi dos kilómetros de ida y vuelta comienza en la ermita de Nuestra Señora de la Soledad de Somosierra y llega hasta el célebre salto de agua, que cae por 40 metros sobre unas impresionantes formaciones de roca granítica.
¿Eres de los que no se pierde una aventura? Si la respuesta es un sí, debes ir al parque de aventura situado en el valle de la Fuenfría. Hasta siete circuitos en los que irás saltando de árbol en árbol a través de tirolinas y puentes colgantes. Acabarás exhausto después de haber quemado tanta energía y soltado adrenalina.
Ciencia, Sistema Solar, misiones espaciales, descubrimientos e historia se unen en la Estación Espacial de Madrid NASA, situada en Robledo de Chavela. Allí encontrarás diferentes salas de exposición donde se encuentran trajes espaciales, documentación única sobre Marte y hasta una roca lunar del Apolo XV. Una experiencia increíble para todas las edades.
Viajar a Finlandia desde Madrid sin salir del país es posible visitando el Bosque Finlandés de Rascafría. Este entorno está rebosante de álamos, abetos y abedules que nutren sus raíces con las aguas del río Lozoya. En las proximidades se encuentra el Real Monasterio de Santa María de El Paular, conocido porque los monjes de este lugar utilizaban la arboleda para crear papel con molinos. ¿Sabíais que la primera edición de “El Quijote” fue hecha con estos árboles? Otro dato: en Rascafría encontrarás de los mejores hoteles con spa en la Sierra de Madrid para dormir durante tu escapada por la naturaleza madrileña.
Las cascadas del Purgatorio, en el valle del Lozoya, son uno de los rincones para descubrir en la Sierra de Madrid con niños. Este gran salto de 15 metros, perteneciente al arroyo del Aguilón, cae con gran caudal entre grandes peñascos. Si lo visitas en verano, podrás refrescarte en sus cristalinas aguas.
Junto al coqueto pueblo de Lozoya está construida la presa de la Pinilla, uno de los cinco embalses construidos para recaudar el agua del río Lozoya. Está permitido realizar actividades deportivas como paddle surf y piragüismo, y en las cercanías se encuentra el yacimiento arqueológico de Calvero de la Higuera, donde se han hallado restos de hombres neandertales. No puedes dejar a un lado los mejores restaurantes de la Sierra de Madrid para deleitar a tu paladar. ¡Buen provecho!
La ruta por el río Alberche es una vía verde que comienza junto al pueblo de Aldea del Fresno. El camino de 10 kilómetros tiene zonas de denso bosque y espacios sin apenas vegetación perfectos para sentarse a comer en primavera. Finaliza junto al embalse de Cazalegas, pero si te apetece andar un poquito más, puedes llegar hasta el bonito pueblo de San Martín de Valdeiglesias.
El pantano de San Juan, no muy lejos de El Tiemblo, está considerado la playa de Madrid y, cada verano, es visitado por miles de locales y turistas que quieren disfrutar de un día en familia o amigos lejos del ruido de la capital. ¿Sabes el secreto que se esconde bajo sus aguas? Un puente medieval de ocho ojos y la ermita de la Virgen Nueva, hundidos tras la construcción del embalse.
El verano en Madrid no es tan duro como parece y menos si tienes la oportunidad de visitar los espacios naturales que ofrece la Sierra Norte. Las Presillas son un conjunto de tres piscinas naturales creadas con las aguas del río Lozoya, y rodeadas de una extensa arboleda para que puedas deleitarte con un rico pícnic en familia. Si te fijas, en el horizonte se puede otear el mítico pico Peñalara.
Concluimos los rincones para descubrir la Sierra de Madrid con niños con una colosal cascada de 80 metros dividida en tres por pozas transparentes: el Chorro Grande. El lugar donde se ubica es especialmente escarpado y ubicado a más de 1500 metros de altitud. Aquí se llega desde La Granja de San Ildefonso por un camino abrupto de tres kilómetros. ¡No te lo pierdas!
No cabe duda de que la Comunidad de Madrid tiene planes en la Sierra Norte de todo tipo. Esperamos que te hayamos ayudado a elegir tu próximo plan de fin de semana